- NATALIA REIGADAS - BADAJOZ - 1 abril 2017
Varios autocaravanistas frente a los vehículos aparcados en la explanada del mercadillo de los martes. Mari Cerrada
Pilar Muñoz y Enrique Gonzalo están sentados en los sofás de su salón. Él mira la televisión y ella trabaja en su costura. Se han levantado, se han duchado, han desayunado y se preparan para salir a dar un paseo. Salen de su casa y están en el aparcamiento del antiguo ferial de Badajoz, junto al Puente Real. Su vivienda es su autocaravana Mercedes con la que han viajado por toda Europa. Ellos no han venido a visitar Badajoz, han venido a vivir a Badajoz cuatro días.
Es la filosofía de los autocaravanistas, como ellos mismos se denominan. La ciudad acoge hasta mañana un encuentro que ha atraído más de 80 vehículos de este tipo y 200 turistas desde el jueves.
El nuevo área de servicios para autocaravanas instalado en el parque del río, junto al Hornabeque del Puente de Palmas, ha colocado a la capital pacense en la ruta de estos viajeros. Esta zona ha llamado la atención de estos conductores que, en esta ocasión, no la utilizan por ser una concentración multitudinaria para la que han solicitado un solar al Ayuntamiento pacense.
Los dueños de autocaravanas tienen muchos foros en Internet donde se comunican. Se dan consejos, comparten experiencias y acuerdan cuáles son los mejores lugares para aparcar. Entre ellos se llaman por motes que son sus apodos en la red. 'Willy Betis' ha sido el organizador del encuentro en Badajoz. Tras este apelativo se encuentra José Luis González, de Sevilla. Forma parte de un grupo de viajeros que se llama 'Las Casitas' porque, cuando se reúnen, forman como una nueva calle en la ciudad. Un barrio de autocaravanas formado por amigos porque llevan mucho tiempo viajando juntos.
José Luis González explica que estos días en Badajoz han acudido autocaravanistas de Asturias, Galicia, Cataluña, Andalucía o Madrid. «Hay un auge por venir a Extremadura porque se ha invertido en poner áreas de servicio para autocaravanas en muchas localidades», explicó ayer. Una de ellas está en Badajoz. La reforma de las márgenes del Guadiana incluyó un aparcamiento para estos vehículos junto al Puente de Palmas y, tuvo tanto éxito, que pronto se amplió. El grupo de 'Las Casitas' destaca que la zona habilitada en la capital pacense está muy bien preparada. «De hecho suele estar llena, ahora hay varios extranjeros», indicó ayer 'Willy Betis'.
Otra de las razones de la concentración de 83 vehículos en Badajoz ha sido Migueli Robles. Esta vecina de Badajoz es autocaravanista y ha apoyado que sus amigos de viajes acudan a la ciudad donde vive. Ella misma participa en la concentración para convivir con ellos estos días. Robles explica que tener autocaravana es un impulso para los que quieren viajar con libertad. «Suele ser una evolución. Primero vas de acampada, luego sueles utilizar caravana y finalmente te compras la autocaravana».
Robles se ha ocupado de gestionar los permisos con el Ayuntamiento pacense para celebrar la concentración en la explanada del mercadillo de los martes. El Consistorio, además de ceder esta parcela, ha colocado un punto de información turística en la zona y ha organizado varias visitas guiadas para estos 200 visitantes. Ayer se dividieron en dos grupos para realizar un recorrido por el centro, desde Puerta Palmas hasta la Alcazaba y hoy irán a conocer el Museo del Carnaval. Migueli Robles es carnavalera «y quiero que vean lo que es nuestra fiesta por eso por la tarde mi comparsa (Yuyubas) vendrá a la concentración para hacer una demostración».
Además de las actividades culturales, José María Moreno, otro de los turistas, llegado de Jerez de la Frontera, destaca que lo mejor es la convivencia entre ellos. La mayoría son jubilados que viajan en pareja y se han convertido en amigos en las concentraciones. Esto también lo destaca Carmen Torrado. Viaja con su marido y con su hijo dependiente. Este último está en silla de ruedas desde hace 20 años y les acompaña en cada viaje. «Gracias a que aquí tenemos amigos excelentes».
«Sí que hacemos gasto»
En sus viajes también hay tiempo para la diversión, especialmente para el turismo gastronómico. Pueden cocinar en sus autocaravanas, pero suelen salir a comer fuera. En Badajoz todos los días han salido «de cañas». A este respecto Casto Rentero, de Madrid, hacía hincapié ayer en que no es un turismo barato. «Piensan que no gastamos, pero sí, estamos en la ciudad como cualquier turista y aquí somos 200».
Las autocaravanas han permitido a estos viajeros moverse por toda Europa. En España encuentran más dificultades porque hay cierto rechazo, aunque ellos insisten en que no son campistas, solo aparcan, así que cumplen con la normativa. Fuera, en Francia, Portugal, etc., este tipo de turismo es muy común por lo que tienen más comodidades.
La mayoría utilizan la autocaravana un fin de semana al mes y luego realizan rutas de hasta tres meses una vez al año. Otros casi viven de este modo. Es el caso de Juan Domínguez, de Algeciras. Este jubilado pasa más tiempo sobre ruedas que en su casa. Suele estar «casi fijo» en la playa de Bolonia. Su destino favorito fue Praga, pero ha ido a Eslovenia, Noruega y «donde queramos ir».
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